Recibimos solicitud de colaboración ciudadana para la localización del vehículo que en el día de ayer causó importantes daños a éste de la imagen y que se fue del lugar sin dejar rastro ni aviso. Lo cierto es que es imposible dar ese golpe y no enterarse, por lo que damos por supuesto la mala fe del conductor causante del siniestro. Resulta difícil comprender que alguien sea capaz de marcharse sin dejar sus señas para arreglar el problema mediante el seguro, porque los seguros están para algo, pero lamentablemente descubrimos una y otra vez la falta de empatía y civismo que nos rodea cuando vemos este tipo de situaciones. Porque a nadie le gusta encontrarse su coche así, ¿a que no?
Recordamos a los lectores de Carriola que recibimos vuestros escritos de queja, colaboraciones e imágenes en el correo julio@carriola.es