Carriola.Redacción.16.02.22
La Plaza de Ponteporto que se sitúa sobre el supermercado Froiz de la Avenida de Orense haciendo techo del mismo, entra en la última fase de su rehabilitación tras las obras realizadas por el concello para eliminar las filtraciones de agua que se colaban hasta el establecimiento inferior. Con pequeños retoques se podrá abrir de nuevo al público en pocos días
Se trata de otra de las obras que el ayuntamiento ha llevado a cabo con cargo económico al remanente de tesorería y por un importe cercano a los 240.000 euros que permitieron la impermeabilización y repavimentación de la superficie extendida en más de mil metros cuadrados junto con los 25 que forman las escaleras de acceso, una desde la Avenida de Orense y, la otra, escalinata central que comunica los dos niveles de la plaza. Además de esta evidente mejora, se aprovechó para dotar a este espacio municipal de siete nuevos bancos así como la sustitución de las luminarias por puntos de tecnología LED.
María Ramallo alcaldesa de Marín y la concejala Marián Sanmartín visitaron ayer las obras a punto de finalizar junto con el equipo técnico para reconocer el avance de los trabajos prácticamente finalizados a falta de pequeños retoques. La regidora municipal recordó que “Xa no 2016 leváronse a cabo estes mesmos traballos no nivel inferior da praza. Por tanto, este proxecto foi case como unha nova fase do anterior e pon fin aos problemas de filtracións de agua que se producían até o momento no establecemento de alimentación ubicado baixo a praza cando chove, así como con algúns problemas de humidades que se detectaron noutros locais comerciais da zona”.
La Plaza Ponteporto se convirtió en municipal por un acuerdo con la constructora que hizo los edificios que la rodean y aprovechó la planta inferior de la superficie central para instalar el supermercado. El ayuntamiento accedió en su día al acuerdo pro heredó los “problemas de terraza” de cualquier obra similar haciéndose responsable de los males que, por causa de las humedades se produzcan en el establecimiento de alimentación. Es de suponer que, con las dos inversiones realizadas en el plazo de cinco años, pase ahora un largo período sin necesidad de gastar dinero público en estas reparaciones.