Carriola.Redacción.20.08.24.
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Las obras tienen estas cosas y ayer le tocó a las que se realizan en la calle Concepción Arenal donde seguramente por u descuido o una mala señalización de las conducciones existentes, se formó un verdadero “chafarís” que llevo el agua de un tubo a varios metros de altura sorprendiendo a todos los que por allí pasaban.
La cuestión no tiene más importancia que la que supone la espectacularidad del caso que ojalá no se repita en lo que queda de la “aceritis” a la que nos tiene encomendado el gobierno local aunque la obra sea de la Xunta de Galicia.